|
||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
|
La Red está repleta de posibilidades para encontrar la media naranja, o incluso, navegando pero sin barco, un amor en cada puerto; allá cada uno con sus preferencias. Se puede ligar, literalmente, a destajo. Otra cosa es que, fuera de la red, el asunto funcione; otra cosa es que uno no se esté ligando a un señor con barba blanca cuando cree haber enamorado perdidamente a una joven de 18 años; y otra, nada extraña, es que la concepción de la estética física sea totalmente incompatible con lo que se ha pescado en la Red y se acabe por salir corriendo cuando, por fin, el otro se convierte en carne y hueso ante nuestros gritos de horror. O viceversa.
En la red pueden encontrarse amigos y amigas que persigan o no el amor como objetivo. Pero, con Cupido para otro momento, y sin la amistad como elemento indispensable, también se logran contactos con quienes comparten una afición, un sentimiento, una inquietud... Puedes encontrar lo que no te imaginas: desde un curso rápido para dar besos hasta un completo manual sobre como ligar en la Red. O incluso consultorios de tipo Señorita Pepis para que te saquen de raíz cualquier duda que acuda a interrumpir tu plácido sueño. Aquí están los enlaces internáuticos que, tal vez, pueden cambiar, para bien o para mal, el sentido de tu vida. Por supuesto, no se aceptan responsabilidades de ninguna modalidad.
|
|