Con humor

 Suscríbete - Buscar - Contactar - Descargas

   
 


Página principal - Zona Activa - Frases célebres - Humor - Cocina - Diario Impersonal - El baúl de la sonrisa

 

Página Principal

Humor

No quiero volver mañana (video)

Tratar con las operadoras de telefonía

Sonríe un rato con Honorato

Chistes

El baúl de las sonrisas

Diccionario Enciclopédico sin ilustrar

Manual del Viajero

Anecdotario informático

Si amas a alguien...

El Pedo (con perdón)

La borrachera: síntomas y soluciones

Carta de Amor

Doctor, doctor..

Unos cuantos chistes más

Colmos

Diario de un desgraciado

Cómo nos duchamos

Respuestas a exámenes

Excusas

Frases históricas

Catalanes

>>>>

 


 

 Curso intensivo para crear Leyes de Murphy

 

La ley de Murphy se cumple incluso para quien intenta modificar sus estatutos. Alguien llegó a estas páginas y sentenció: “si te piden que inventes un Murphy, no se te ocurrirá nada”.

Y es así de sencillo: cuando tienes ocasión de escribirlos, tu mente se queda en blanco; y cuando se te ocurren a patadas, no tienes con qué escribirlas y se desvanecen con la brisa.

Para la creación de una nueva ley no hace falta echar mano de la inspiración. Basta con estar atento y observar las cosas que van ocurriendo a lo largo de la jornada. Y contar con una técnica de captura. Hoy es más fácil que nunca.

Si te das cuenta, las páginas de Internet con más leyes de Murphy son las creadas por electrónicos o informáticos. Y es que es fácil que algo te salga al revés de lo que esperas y que todo se complique de tal manera que no sepas por donde salir ni te acuerdes por donde has entrado.

El revolucionario método que estás a punto de descubrir no sólo sirve para que ninguna de las leyes que se te vayan ocurriendo se te escape, sino para cosas incluso más importantes en esta vida. Sirve el procedimiento para que las ideas que se te ocurran no se disipen, sino que fructifiquen y te ayuden a mejorar, bien la calidad de vida, bien la cantidad y calidad de tu trabajo. O para perfilar un proyecto con mayor profundidad.

Pasamos a contarte, paso a paso, uno de los secretos jamás desvelados hasta el momento. Pero te rogamos que no se lo cuentes a nadie.
 

Método clásico

Consiste en dotarse de dos elementos esenciales, de tal modo que siempre, en cualquier lugar y bajo cualquier circunstancia, puedas activar sus funciones.

El primero, y más importante, es un pedazo de papel. No importa el formato: puede ser un simple trozo de una hoja, una libreta, un rollo de cocina, una tira, un cartón, etc.

El segundo elemento, complementario al anterior, como se verá más adelante, es algo que permita escribir sobre el papel: una pluma de pollo (con tinta), un lápiz, un boli, una tiza, una estilográfica…

Este sistema consiste en observar, estar atento, utilizar la imaginación a lo que pasa, a lo pudiera pasar o a lo que podía haber pasado; anotar las contrariedades que se van presentando, los obstáculos que van surgiendo, escuchar (la radio, la tele, los amigos, los jefes...) con escepticismo los consejos que te van dando y, en fin, ser consciente de que es más importante que las ideas se anoten que la propia ocurrencia. Porque si no se anotan, se almacenan en un baúl de los recuerdos que nunca te acordarás de abrir.


Método sofisticado

La vida moderna ofrece situaciones en las que un papel y un boli no sirven para nada. Se te ocurre una genialidad y, aún teniéndolos a mano, no es posible su utilización.

Es por ello que hay que adaptarse a los nuevos tiempos para que nada pueda afectar a los resultados.

Por ejemplo, algunos nos pasamos buena parte de nuestro tiempo sentados plácidamente conduciendo el coche que nos lleva al trabajo. O incluso más tiempo porque el coche forma parte de él. Si, por ejemplo, nos acaban de poner una multa por pasarnos dos minutos aparcando en la zona azul, y luego vemos como un conductor se pasa todas las líneas continuas habidas y por haber, la inspiración sobre una ley acude de inmediato.

Por suerte, hay métodos para que quede plasmada. Basta utilizar las nuevas tecnologías. Las agendas electrónicas, las minúsculas grabadoras, incluso un móvil, pueden servir para grabar tanto esas leyes como esas ideas que se nos van ocurriendo sobre el complejo proyecto que tenemos entre manos.

Eso sí: la ayuda tecnológica debe contar con una extremada facilidad para su puesta en marcha. Con apretar un botón debe bastar. Más allá puede resultar peligroso y es mejor olvidarse de todo cuanto pase por nuestra mente que arriesgar la seguridad.

Por tanto, y resumiendo, si se te ocurre algo brillante, grábalo o escríbelo y guárdalo donde puedas leerlo con facilidad. Te sorprenderás de la cantidad de cosas que se te ocurren por poco que lo intentes.

Y luego, acude aquí y compártelas. Te esperamos.

 

 

  Tal vez te interese
 
La autoestima
Estamos elaborando, poco a poco, un completo manual para fortalecer un aspecto fundamental para ser más feliz: la autoestima.
 
 


El funcionario

¿Mito o leyenda? ¿Es merecida la mala fama que tienen los funcionarios? ¿Te has sentido alguna vez maltratado por uno? ¿Este video es humor o realidad?

 


Respuestas a exámenes
Efectivamente, algunos niños merecen un cero patatero en la materia que han estudiado. Pero un 10 en imaginación. Son respuestas verídicas a exámenes.

 

 

 

 
 

 

 

 

 

Web hosting by Somee.com