Cuaderno de apuntes - Página principal La duda La duda, sobre todo cuando nos sentimos abatidos, es una pesada y molesta carga que no se nos permite descargar en ninguna parte. Debilita implacablemente. Llega un momento en que se duda de todo: de poder salir de una situación, de la sinceridad de quienes dicen apreciarnos, de las decisiones que se tienen que tomar, de las que se han tomado. Las dudas se acumulan, se reproducen y llegan a resultar desesperantes. Es lógico pretender despejar las dudas, salir del interminable estado de incertidumbre. Cuando las dudas suponen un peso mayor del que podemos cargar, nos aferramos a cualquier cosa que suponga la menor posibilidad de consuelo. Necesitamos asegurarnos de que hemos tomado la mejor decisión, y lo consultamos con algún "experto", aunque a veces no sepa lo que está hablando. Queremos estar completamente seguros de que en el trabajo no van a despedirnos jamás. Y preguntamos sobre el resultado del análisis médico antes de ir a la consulta. Es preferible una mala noticia que mantenerse en tierra de nadie. Pero la vida es impredecible, cambiante y nada permanece. Todo tiene un principio y un final que nadie sabe cuando se producirá. La duda no debe ser tomada como un enemigo, sino como parte de nosotros mismos; es como un órgano más de nuestro cuerpo. Pretender anularla es hacernos más daño del que nos provoca la relación con ella; es desear lo inalcanzable y sumar al sufrimiento de la duda el de la frustración. La duda, en definitiva, debe asimilarse como es, contemplarla con serenidad, como si estuviéramos sentados en la butaca del cine dispuestos a dejarnos sorprender. Y escucharla, porque nos está diciendo muchas cosas sobre nosotros mismos. Aceptar vivir en la duda es dejar atrás esas cadenas, pesadas y dolorosas, que con tanta fuerza nos aferran a lo imposible: lo seguro, lo permanente y la certeza absoluta. La vida es una sucesión de sorpresas. Se alternan las agradables con las desagradables. Y es mejor saber moverse con agilidad ante ellas que obsesionarse en que no se produzcan. |